Las experiencias vividas en este país han sido inolvidables. Desde el niño mas pequeño, al hombre mas anciano, siempre nos trataron con respeto, educación y alegría. Dejo aquí unas pocas fotos que hice a lo largo del país al que estoy deseando regresar.
En el mausoleo a los caídos de Volgogrado (antigua Stalingrado) cada dos horas hacen el correspondiente cambio de guardia. Realmente este es un lugar impresionante debido a la historia que se encierra en esta ciudad Rusa. Mucha gente murió luchando por defender la ciudad de los nazis, y lo consiguieron, después de meses de batallas, finalmente los Alemanes se retiraron, ya que les fue imposible vencer a los Rusos y al intenso frío que segava vidas sin piedad a un ejercito que no estaba preparado para soportar esas temperaturas bajo cero.
Mongolia es un País muy grande en donde hay muchas personas que viven en el umbral de la pobreza. Estas niñas me las encontré un día muy gris, no solo por el cielo, si no por algunos acontecimientos que alludaron a engrisecer todo. Era un pueblo lejano a la capital llamado Altai, al que solo se llega por un camino de tierra que en algunos tramos se hace intransitable por los baches, ríos, arena del desierto del Gobi, en fin, un lugar casi remoto, en una Mongolia bastante pobre en sus zonas rurales. Pero allí estaban ellas, con unas sonrrisas que llenaban e iluminaban ese lugar y hacian desaparecer todo color gris del cielo y de mi mente.
Este niño pasa sus manos por los cilindros de oración, en ellos se encuentran los cuerpos calcinados de los monjes que habitaron este templo en Mongolia.
